El economista Haivanjoe NG Cortiñas, al ofrecer la conferencia: Impacto del envío de dólares a dominicana en la ciudad de Manhattan, Nueva York, ante un nutrido público, consideró ser cuidadoso ante la posibilidad del efecto Trump sobre el mercado cambiario dominicano, de no tomarse las medidas mitigadoras previsibles y necesarias.
Al examinar el triunfo de Donald Trump en la recién elección presidencial de los Estados Unidos y su posible impacto sobre las remesas enviadas desde ese territorio hacia dominicana, NG Cortiñas, consideró que ante la perdida de valor de algunas monedas latinoamericanas y europeas frente al dólar, como impacto inmediato en el mercado de dinero, y la política proteccionista que se avecina, existe ahora, más que ayer, la posibilidad de que sea elevada la tasa de interés de la reserva federal norteamericana, por el efecto Trump, alimentada también por la revisión de los tratados de libre comercio, pudiendo implicar incentivos a la posible salida de capitales en países como dominicana y presionar por esa vía el tipo de cambio.
Ante ese posible escenario, es recomendable monitorear el mercado de dinero, dado que existe la posibilidad que se trate de especular con la moneda norteamericana, impulsando con ello el mercado de futuro de divisas en el territorio nacional; por lo que el ámbito monetario debe ser proactivo en los instrumentos de política cambiaría y monetaria de la economía dominicana, para mitigar o neutralizar cualquier impacto de depreciación en el tipo de cambio, a consecuencia del efecto Trump.
NG Cortiñas al ponderar la importancia del envío de remesas a dominicana, recordó que la emigración de nuestros ciudadanos hacia los Estados Unidos, como fenómeno de importancia se inició en la década del 60 del siglo pasado, llevándola al 1990 a alcanzar 382 mil personas, para luego situarse en alrededor de 710 mil en el 2000, y ya para el 2013 ascendió a 982 mil nacidos en territorio dominicano.
Con la emigración se origina el envío de divisa hacia su país de origen, India es la principal nación del mundo en ser receptora de remesas con US$71 mil millones, seguido de China con US$60 mil millones, y en América Latina, México encabeza la lista, al recibir alrededor de US$24 mil millones al año y la República Dominicana ocupa el tercer lugar con US$4,960 millones al 2015, señaló el economista.
Haivanjoe NG consideró que las remesas constituyen el mejor de los ingresos en divisas que tiene un país, si se examina desde la perspectiva de que no implica ningún o muy poco esfuerzo interno para generarla, fundamentó su afirmación diciendo, “las exportaciones son nuestra principal fuente de divisas, pero implica costos asociados a la importación de maquinarias, equipos e insumos y por lo tanto salida de divisas, el turismo, como segunda fuente de fondeo de divisas, también requiere de importación, repatriación de capitales e impactos ambientales, y por la inversión extranjera de igual manera está asociada a los mismos costos de las anteriores”.
El economista dijo que en el caso de las remesas, estas se efectúan sin ninguna contraprestación de servicios e importación de bienes; de manera que se reciben con costo cero, a no ser el de la mano de obra emigrante; misma que al no encontrar colocación doméstica o ingresos competitivos en términos monetarios, termina ejerciendo un efecto positivo al mercado laboral local, al quitarle presión al empleo.
Las principales fuentes de ingresos de divisas en la economía nacional provienen en orden de importancia de las exportaciones con 42.0%, el turismo con 27.0%, las remesas con 22.0%, y la inversión extranjera directa con 9.0%, para un monto de US$22,857 millones al 2015, enfatizo NG Cortiñas.
Al ser la balanza comercial dominicana deficitaria, en un nivel de US$7,340 millones al 2015, las remesas representan el 68.0% de ese balance, lo suficientemente significativo, como para apreciar la importancia de las remesas, a juicio del economista.
Haivanjoe NG ponderó que por el lado de las importaciones que alcanzaron US$16,863 millones, las remesas representan el 29.0% de su valor total, el 81.0% del valor del servicio de la deuda pública, de la inversión extranjera directa el 123.0%, respecto a las reservas internacionales el 95.0% y con relación al PIB asciende a 7.3%.
El economista afirmó que desde Estados Unidos los dominicanos envían remesas por un monto de US$3,521 millones al año, representando el 71.0% del total de las remesas, las cuales son canalizadas por las empresas remesadoras en un 74.0% y las entidades financieras en un 26.0%.
NG Cortiñas agregó, el monto promedio por cada transacción de remesas recibidas desde USA es de US$206.0 al año, la localidad receptora del mayor volumen de divisas es el Distrito Nacional con 30.5%, seguido de Santiago con 15.0% y la que menor recibe es la provincia María Trinidad Sánchez con 1.5%; en términos de género, el 58.0% son del sexo femenino y el 42.0% masculino.
El aporte dado por la comunidad dominicana en USA, a través de las remesas recibidas en el país, se hacen merecedor no solo de reconocimiento; sino de facilidades e incentivos estatales, para aquellos dominicanos que quieran adquirir su primera vivienda en el país, a los que decidan realizar inversión directa, e incluso, para los que opten por colocar sus ahorros en dólares en las entidades financieras o el mercado de valores; de esa forma también se fomenta las posibilidades de aumentar el envío de remesas, fortaleciendo la liquidez externa de la Nación, sugirió Haivanjoe NG Cortiñas.
Los incentivos a los que me refiero serían el de darle exención impositiva a la adquisición de la primera vivienda, sin importar el tipo de proyecto, respecto a la inversión directa, otorgarle exención por una año, a partir de la puesta en operación de la unidad económica, y también ofrecerle exención a los ahorros e inversión en el mercado de capital dominicano. Estos beneficios podrían hoy justificarse aún más, dado la posibilidad del efecto Trump en la economía dominicana.
NG Cortiñas finalmente dijo, “estas sugerencias no deben ser vistas como privilegios onerosos para el fisco, dado que el ahorro monetario de los dominicanos en el exterior cumplieron con la contribución impositiva en los Estados Unidos; por lo que la República Dominicana tuvo un costo cero en la generación de esas divisas con vocación de remesas recibidas”.
Nueva York, 12 de noviembre, 2016